martes, 26 de noviembre de 2013

Coque: El futbolista que se fugó con Lola Flores

Coque era un gran interior a principios de los años 50. Protagonista de una gran hazaña con el Valladolid, con el  que había subido en dos temporadas de Tercera a Primera. Con dicho equipo, llegó a jugar la final de copa de 1950, que perdería ante el Athletic de Bilbao. Había debutado incluso en la selección en un partido oficial, ante Irlanda,  un 6-0 en el Bernabeú en donde había marcado uno de los goles

Era un interior de ida y vuelta, mucha presencia, claridad en el  juego y un potente disparo. Una estrella que emergía. El Atlético de Madrid le fichó al comienzo de la temporada 53-54, para compensar la salida de Perez-Payá, que jugaba como amateur en el conjunto rojiblanco y que al hacerse profesional prefirió pasar al Real Madrid. Coque firmó una buena primera campaña con el Atlético, con veinticinco partidos y siete goles. El Atlético estaba seguro de haber conseguido un buen jugador para muchos años.

Pero todo se complicó cuando conoció a Lola Flores, "la Faraona". Lola Flores era una cantaora y bailaora de enorme éxito, y una mujer de armas tomar. Había empezado a tratar algunos futbolistas, como Biosca defensa central del Barcelona, pero se le mostraba esquivo. Para darle celos a Biosca, Lola escogió a Coque y Coque accede al cite encantado, la relación se consolida y Coque empieza a tener menos tiempo para el fútbol. Los compañeros se lo hacen saber, pero él empieza a faltar a los entrenamientos. O a llegar tarde, mal dormido, y poco dispuesto al trabajo. Su vida ya no es el fútbol; su vida es otra, es la farándula, los tablaos, el baile, el trasnoche, el amor apasionado de madrugada. El club le multa, pero no reacciona.
La víspera de un partido en casa, no aparece y corre un rumor: que se ha fugado con Lola Flores a América.

El rumor se confirma. Las noticias que días después llegan de America certifican que la Faraona viaja con Coque, que ha dejado plantado al club, y su nombre hasta aparece en los carteles del espectáculo de Lola Flores como productor. El Atlético le denuncia y Lola Flores tiene un gesto "torero":  envía al Atletico las 50.000 pesetas de la ficha del jugador. No había fuerza que pudiera separarles. El Atletico se resigna: se ha quedado sin Coque. Y Coque se ha quedado de paso sin su carrera futbolistica.

El tiempo gasta la relación y Coque regresa. Jugará algo en el Racing de Santander, pero ya no es el mismo. Vuelve a Valladolid, donde su mujer le perdona, intenta jugar de nuevo en el club de su tierra, pero ya no está para nada. El fútbol se había acabado para él. Y es que la Faraona fue mucha Faraona....

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