Pero pronto triunfó, con dieciocho años debutó marcando con la selección escocesa en Cardiff,. Pronto firma por el Manchester City por 55,000 libras, récord de traspaso británico hasta la fecha, en lo que resultó un negocio redondo, ya que al año siguiente fue traspasado al Torino por el doble de dinero 110,000 libras. Pero como tantos y otros británicos antes y después, se aburre en el calcio, entonces ultradefensivo, y ficha por el Manchester United en 1962, por 115 000 libras.
Ahí encuentra su mejor época, junto a los citados Best y Charlton y unos cuantos grandes jugadores más. Con ellos, el United gana por fin su primera copa de Europa en 1968, si bien Law lesionado en la rodilla no pudo jugar la final. Acumula goles y partidos en la selección escocesa, Durante años es un ídolo para la aficion del United que le apoda "The King", y está orgullosa de él, de su porte elegante, de su juego sutil, de sus numerosos goles. Gana el primer balón de Oro de la historia del club.
Pero su carrera iba a tener un final sonado el 27 de Abril de 1974. Con treinta y tres años el Manchester United decide no renovarle, y él con la carta de libertad, firma por el Manchester City, para el que va marcar en el segundo año el último gol de su carrera, el que jamás hubiera deseado.
Sucedió en la jornada final del campeonato cuando se enfrentaron los dos equipos de la ciudad.. El United, en clara decadencia, metido en una reconversión del viejo y glorioso equipo que no acaba de cuajar, estaba en grave riesgo de descenso. El partido se disputa entre nervios y emoción, y, cuando se acerca el final Law caza un balón suelto en el borde del areá chica del united; aunque está de espaldas, resuelve con un taconazo que entra en la portería limpiamente. Es el 0-1.
Law se queda paralizado, no lo celebra, sus compañeros le miran con comprensión, él pide el cambio y es relevado. Será su último gol. Aún jugará un partido con su selección.
Acabado el duelo, supo al menos, que la victoria ese mismo día del Birmingham hubiera provocado igualmente el descenso del United, aún en el que caso que el derby de Manchester hubiera terminado en tablas. O sea, su gol, no descendió al United. Pero eso él no lo sabía en el momento de marcarlo y no pudo evitar su sensación de dolor.
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